Es el deporte de aventura de mayor crecimiento en el país. Se empezó a practicar en el Perú a mediados de la década del ochenta. Desde entonces no ha dejado de crecer, tanto en número de participantes como en número y calidad de los circuitos.
Se le conoce mundialmente con el nombre de mountain biking o mountain bike. Sus miles de adeptos recorren hoy en día con sus ligeras bicicletas cuanta quebrada y camino de herradura existe a lo largo de la geografía limeña.
En realidad, casi cualquier rincón del territorio peruano, con excepción del desierto costero y la llanura amazónica, es apto para la práctica de la bicicleta de montaña.
Sin embargo, en función de su dificultad y requerimientos logísticos, los circuitos pueden ser agrupados en tres grandes categorías:
Categoría A: considerada apta para principiantes. Comprende rutas de suave pendiente y terreno duro y compacto.
Categoría B: para bicicleteros con cierta experiencia. Incluye circuitos que se desarrollan sobre zonas de pendiente moderada y conllevan un nivel de riesgo para quienes los practican.
Categoría C: reservada para los expertos. Se caracteriza porque los terrenos donde se practica son terrenos de gran pendiente y suelos sumamente "deleznables o de consistencia blanda (conlleva un alto nivel de riesgo y, a menudo, supone alcanzar grandes altitudes).